El pie diabético es una complicación médica que no tiene cura, afecta los nervios de los pies y puede provocar daño en la circulación de la sangre. Esto ocurre con frecuencia en personas con diabetes, debido a niveles inadecuados de glucosa en sangre y también en personas con hipertensión arterial y/o hipercolesterolemia.
Esta enfermedad suele producirse luego de una lesión o ulceración en el pie de una persona con las condiciones indicadas anteriormente, y termina regularmente con amputaciones parciales o totales en los miembros inferiores. Por esto, es calificada como el diagnóstico “más temido por los pacientes diabéticos”.
En busca de concientizar sobre este diagnóstico, el cirujano de pie diabético David Ovalles explicó todo lo que debes saber sobre esta situación, cómo prevenirla y tratarla.
“Esto es el resultado de una complicación en una enfermedad crónica que no ha estado en control, pero con una inspección adecuada de la glucemia se puede evitar las dificultades del pie diabético, ya que es el resultado del descontrol metabólico causado por la diabetes”, indicó el doctor Ovalles.
Informó que para evitar esta condición es necesario que el paciente en riesgo lleve a cabo un seguimiento periódico con especialistas, como diabetólogo o endocrinólogo, lo que le permitirá mantener niveles adecuados de azúcar en sangre, “con esto se evita o se retrasa de manera importante llegar a la condición de pie diabético”.
En caso de que existan lesiones, las revisiones estarán a cargo de un cirujano de pie diabético, quien tratará las alteraciones, sea por una herida simple o un trauma mayor, y así impedirá “las traumáticas amputaciones”. La respuesta temprana y tratamiento oportuno es clave.
“En un número importante de los casos deben intervenir diferentes expertos, entre ellos cirujanos vasculares, quienes tratan el daño vascular producido por los niveles elevados de glucosa en sangre, con esto reducimos de manera importante o evitamos que se llegue a este tipo de procedimientos incapacitantes”, añadió Ovalles.
Asímismo aseveró que pueden intervenir dermatólogos, en caso de que se presente infección por hongos en las uñas y entre los dedos del pie, las cuales podrían degenerar en un pie diabético y agravarse.
Las consecuencias de esta complicación médica pueden ser deformidades y callosidades en los pies, resequedad en la piel, engrosamiento y grietas en la planta de los pies, lo que permitirá el ingreso de bacterias que provocan infecciones que pueden complicarse.
“Si se descuida el paciente resultaría en pérdida de la sensibilidad protectora del pie (no sentir dolor ante alguna herida o trauma en el pie)”, especificó el cirujano.
CUIDADOS
Dentro de las recomendaciones del doctor Ovalles para cuidado general del pie diabético, está “mantener control de su condición de pacientes diabéticos, disciplina y apego al tratamiento”.
Además de no caminar descalzo, utilizar “calzados adecuados (existen calzados diseñados especialmente para diabéticos)”, revisar los pies diariamente después de bañarse y luego de largas caminatas o ejercicio. Asimismo, usar cremas humectantes, exfoliantes especializadas para pacientes con esta condición y acudir frecuentemente al especialista.
La familia juega un rol importante en el cuidado del paciente, debido a que “esta condición requiere que el paciente mantenga una disciplina en su alimentación”, estilo de vida, seguimiento y apego al tratamiento”.
Ovalles también informó que es “sumamente importante” el acompañamiento médico, para evitar la pérdida parcial o total de la extremidad por procesos infecciosos o traumáticos causados por lesiones.
No es necesario disponer de grandes sumas de dinero o seguros médicos para darle el seguimiento de lugar, debido a que existen centros a bajo costo como el Hospital Escuela Doctor Jorge Abraham Hazoury (Inden), y otros gratuitos donde las personas con este diagnóstico pueden llevar su chequeo regular, es el caso de los hospitales en los que hay unidades de pie diabético y especialistas en diabetología, endocrinología y cirugías de pie diabético, como el Hospital Docente Universitario Doctor Francisco Eugenio Moscoso Puello, el Hospital Salvador Gautier, entro otros.