Barcelona. – Un equipo internacional con participación del Instituto de Neurociencias de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) ha demostrado que la dexametasona, un fármaco antiinflamatorio, puede mejorar significativamente la tolerancia del organismo a los implantes protésicos neurales. El estudio, publicado en la prestigiosa revista Advanced Healthcare Materials, fue desarrollado por investigadores de las universidades de Ferrara (Italia), Friburgo (Alemania), Chalmers (Suecia) y la UAB, en el marco del proyecto europeo BioFINE.
La investigación se centró en resolver uno de los mayores desafíos de las prótesis neurales: la respuesta inmunitaria que genera rechazo y formación de tejido cicatricial alrededor del implante, comprometiendo su funcionalidad a largo plazo. La solución propuesta consiste en recubrir los implantes con dexametasona, utilizando una innovadora técnica química que modifica la superficie del material poliimida (común en estos dispositivos) para liberar el fármaco de manera localizada y prolongada (hasta dos meses).
«Este método permite reducir las señales inflamatorias en las células inmunitarias sin afectar la biocompatibilidad o resistencia mecánica del implante», explican los autores. Las pruebas en modelos animales confirmaron que la dexametasona disminuye la reacción inmune y la formación de tejido fibroso, lo que podría extender la vida útil de las prótesis.
El profesor Xavier Navarro, investigador principal por parte de la UAB, destaca: «Este es un paso fundamental que debe complementarse con la demostración in vivo de que este recubrimiento mejora el rendimiento funcional de los electrodos implantados crónicamente en los nervios periféricos». Estos electrodos, añade, son clave para «estimular y registrar señales nerviosas» en pacientes con amputaciones o lesiones graves.
Este avance representa un hito en la neurotecnología implantable, pues aborda un problema crítico: el 30% de los implantes neurales pierden eficacia por rechazo inmune. El siguiente paso será validar su impacto en la recuperación funcional de pacientes, abriendo puertas a prótesis más estables y duraderas.
Con información de elnuevodiario
