Manuela González fue ingrasada a cirugía sin la autorización de ella o su madre este pasado jueves en el hospital Señora de Regla de Baní, en horas de la madrugada. Pasando los días sin mostrarle cual había sido la razón y lo que le habían extirpado.
La madre de la joven de 20 años, Mercedes Pérez declaró ante los medios locales, que el Miércoles 22 de Marzo llevó a su hija al centro de salud con un dolor abdominal, le hicieron una prueba de embarazo que dio positiva y la mandaron a realizarse dos sonografías en centros privados que, según afirma, arrojaron resultados negativos.
Pasada la medianoche del Jueves, indicó un doctor de apellido Valdez que, al no tener un diagnóstico claro a las 7:00 de la mañana del Jueves, le haría un examen a la joven para determinar su condición. El especialista le garantizó, siempre de acuerdo con la madre, que no sería medicada ni sería intervenida hasta la mañana siguiente, y le pidió dejar su número de teléfono para contactarla ante cualquier eventualidad.
Asimismo, agregó, decidió irse y a los cinco minutos, todavía en el parqueo del hospital, el doctor Valdez “va y busca a mi niña y le dice que va para operación; la niña piensa que yo estoy afuera porque como fue tan rápido. Él se la llevó a cirugía, la operó, y todavía no sé de qué”.
Igualmente, la madre dice que no fue llamada por teléfono para informarle, aunque su número lo pusieron en el récord y “el doctor me prometió que no le haría nada”. A la paciente no le permitieron tener teléfono en la sala, pero estaba en condiciones de llamar, según dicen. En la extensa narración de lo sucedido, señala que le dijeron que su hija hasta convulsionó y le pusieron sangre.
Por otro lado, un camillero la llevó a la sala y gritó: “Esta muchacha no tiene familia”, a lo que una señora, no conocida por la madre, se ofreció a cuidarla. La madre contó que llegada la hora acordada para el estudio, el doctor Valdez la llamó irresponsable, y le dijo: “Ahora es qué usted viene, ya su hija está operada”
Declaraciones del Hospital
Después del revuelo en las redes sociales, la dirección del Hospital Nuestra Señora de Regla y el personal médico involucrado en el caso de la paciente Manuela Gonzalez, se vieron en el deber y la responsabilidad de explicar que priorizaron salvar la vida de la joven.
Reconoció que el protocolo establecido en la Ley General de Salud 42-01, sobre el Consentimiento Informado, antes de proceder a intervenir quirúrgicamente a la paciente, se desestimó debido a que su estado lo ameritaba para la cirugía para salvarle la vida.
El director del centro, José Lara, dijo que la joven llegó vía emergencia, con fuerte dolor abdominal y sangrado transvaginal. Tenía un embarazo de diez semanas de gestación. Con ese diagnóstico, fue ingresada en área de maternidad, donde no se permite la presencia de familiares.
