Un grupo de neurocientíficos ha dado inicio a una plataforma innovadora que podría acelerar el progreso en el tratamiento de enfermedades cerebrales, como el Alzheimer y el Parkinson. Durante décadas, los científicos han enfrentado desafíos considerables debido a la complejidad y la inaccesibilidad del cerebro humano. Los conjuntos de datos recopilados para la investigación son extensos, pero carecen de un lenguaje científico universal, dificultando la síntesis y la centralización de información crucial
los datos de aproximadamente 200 mil millones de células cerebrales. Estos datos, disponibles como una herramienta de código abierto, serán utilizados por médicos y científicos en la búsqueda de tratamientos y curas para las enfermedades cerebrales.
La directora general de salud sin fines de lucro y sin fines de lucro de AWS, Allyson Fryhoff, destacó la importancia de la inteligencia artificial y el aprendizaje automático en este proyecto: «Allen está utilizando tecnologías avanzadas en la nube para acelerar sus hallazgos de una manera rentable y escalable. Estamos inspirados por su trabajo para desbloquear conocimientos nunca antes vistos sobre el cerebro humano, y esperamos con ansias los muchos cerebros». avances de la investigación por venir».
David Van Essen, profesor de neurociencia en la Universidad de Washington en St. Louis, Missouri, y socio de investigación del Instituto Allen, ha estado estudiando el cerebro durante más de cinco décadas. Compara el ritmo acelerado de la investigación del cerebro con la evolución del mapeo geoespacial.
“Hace siglos, teníamos mapas coloridos pero bastante toscos de cómo pensaba la gente que era la superficie de la Tierra. Los cartógrafos sabían aproximadamente dónde estaban los continentes y las islas, y cuáles eran las principales subdivisiones geográficas y políticas, pero no eran muy precisos”, dijo Van Essen. “Recientemente, ha habido una explosión de información y mejor tecnología con imágenes satelitales y herramientas de navegación mucho más precisas y fáciles de usar. Lo que aspiramos hacer por el cerebro humano es obtener mejores y mejores mapas con cada vez más detalles, que se convertirán en poderosas herramientas de navegación para los trastornos cerebrales”.Lein y su equipo recién están comenzando este proyecto de cinco años para mapear el cerebro humano, que, al igual que el Proyecto Genoma Humano anterior, tiene el potencial de abrir nuevas puertas, no solo en neurociencia, sino en toda la medicina
